Según la forma con la que se sopla en la embocadura, los instrumentos de doble lengüeta han formado ya dos grandes grupos: en uno, la caña se encuentra directamente en contacto con los labios, y en el otro, la caña se encuentra en el interior de lo que se puede llamar cápsula, de manera que no está en contacto con los labios del instrumentista. Esta última forma de tocar parece la más antigua, pues aunque no haya cápsulas propiamente dichas, la boca puede desempañar esta función. Numerosos instrumentos han sido así utilizados y aún lo son. En esta diversidad de instrumentos no es posible designar al precursor del oboe, muchos de ellos podrían estar provistos tanto de una caña de doble lengüeta como de lengüeta simple. Pero esta evolución puede ser también tomada para los clarinetes. Hablamos de instrumentos de doble lengüeta identificándolos con los oboes, y de lengüeta simple con los clarinetes; sin embargo no olvidemos que tanto en la Antigüedad, corno en las culturas extraeuropeas, existen numerosos instrumentos que pueden perfectamente combinar las características de uno y otro grupo. Se ve hasta que punto son coincidentes estos grupos si tenemos en cuenta los siguientes criterios:
a) los instrumentos de la familia del oboe tienen un cuerpo cónico; cuando se sopla con fuerza dan enseguida la octava superior.
b) la familia de los clarinetes tiene un cuerpo cilíndrico, y cuando se sopla con mayor intensidad suena la duodécima superior.
Cromorno moderno |
Sordun |
Teniendo en cuenta estas características, tendremos graves dificultades para clasificar el saxofón y el "tarogato": ambos instrumentos pese a tener una lengüeta simple, octavean, tienen cuerpos cónicos y son clasificados con los clarinetes. Incluso hoy se intenta sustituir la caña del oboe por una lengüeta simple (de más fácil control), sin que por ello estos instrumentos se conviertan en miembros de la familia de los clarinetes.
Por otra parte, una serie de instrumentos pertenecientes a la familia de los oboes, como los cromornos, los "corthols', y los "sorduns", presentan el cuerpo cilíndrico característicos de los clarinetes.El oboe en el Antiguo Egipto
Dentro de los materiales naturales que el hombre "prehistórico" utilizó para fabricar sus flautas de hueso, los instrumentos de percusión o los arcos musicales, se puede incluir las pequeñas cañas aplastadas que con un soplo adecuado vibraban produciendo el sonido de carraca o cigarra. Éstos útiles pudieron servir para imitar los sonidos naturales, para responder a las pretensiones culturales de sus usuarios, o simplemente para satisfacer el placer del juego o de la experimentación. (Aunque todo esto no son más que hipótesis).
Las primeras representaciones de instrumentos de caña se remontan al tercer milenio antes de J.C. Se considera hoy como el primer oboe, un instrumento de plata descubierto en el Cementerio Real de Ur (Mesopotámia). Los arqueólogos estiman que el instrumento en cuestión tiene una datación aproximada de 2800 años a. de J.C. Curt Sachs admite que este oboe, con tres agujeros, producía sonidos a intervalos de tonos enteros;él supone que a causa de la estrechez del tubo no se producían los sonidos fundamentales, sino directamente la octava superior. Soplando más fuerte, se obtenían las quintas más agudas. Este tipo de instrumento estaba propagado por todo el Próximo Oriente, y se encuentra en representaciones particularmente sorprendentes sobre las pinturas de la tumba de Thutmosis IV (1400-1390 a. J.C.) y de Amenofis II (1390-1352 a. J.C.).
Una pintura mural, conservada solamente en parte representa un festín conmemorativo en honor de un difunto, muestra una tocadora de oboe doble de frente (excepción muy rara en el arte egipcio, en cuyo canon se representan generalmente las figuras de perfil) de manera que podemos reconocer las dos embocaduras de caña que son de un color más claro. Los jeroglíficos reproducen parcialmente el texto de canto de la danza. Otro fragmento muestra un oboe doble con dos laudes de largo mástil. En otras pinturas murales se representa jóvenes tocando un oboe doble, un arpa, un arco y un arpa sostenida por los hombros, así como un laud de largo mástil. Sachs admite como cierto que el arpa estaba afinada de modo no armónico. Sus cuerdas estaban afinadas a intervalos de tercera mayor seguidos del semitono vecino.
Es probable que los griegos, posteriormente, tomasen esta sucesión de notas, y que afinasen la escala dividiendo aún el semitono. En los instrumentos de viento madera egipcios los agujeros son taladrados según los mismos intervalos aproximados de tonos y semitonos, pero ciertamente era necesario corregir la afinación tapando parcialmente los agujeros.Según las representaciones de la época, parece ser que las cañas habían sido presionadas entre los labios, sin intermediarios, como para el oboe moderno, de modo que era muy fácil modificar la sonoridad y la altura del sonido, lo que no se puede realizar con los instrumentos de cápsula. Parece ser que también se utilizaron instrumentos de diferente longitud que permitía tocar en diferentes registros.
El "aulos" griego
El Aulos griego |
En su duodécima Oda Pítica, el poeta y músico griego Pindaro (518-436 a.J.C.) descubre el origen del "auletique". Según esta descripción es la diosa Palas Atenea quien lo inventó después de que Perseo hubo decapitado a Medusa. La Oda fue escrita hacia 490 a. J.C., para Midas de Agrigento, después de que este hubo triunfado en Atlética (prueba de tañer el aulos en competición), en los Juegos Pitidos de Delfos, los más celebres junto a los Juegos Olímpicos. Esta Oda no sólo nos enseña la importancia de tocar el aulos (cuya invención sé atribuye a la hija preferida de Zeus), sino al mismo tiempo las cualidades sonoras y expresivas de este instrumento: "canto sonoro" y "lamento ruidoso". En la última estrofa está descrita también la materia de la que se hace el instrumento: "delgado bronce", y el lugar donde crecía la mejor caña. Por otra parte también se han descubierto instrumentos en
madera, en hueso y en marfil. Sin embargo el aulos no parece que tuviese un origen típicamente griego, ya que Homero, ocho siglos antes de J.C., no lo nombra en la Iliada más que cuando describe las conversaciones de los troyanos.
Una estatua de mármol que representa un instrumentista tocando un instrumento doble, puede ser de lengüeta, se encuentra ya en las colecciones de las Cycladas de 3000 años antes de J.C. Si el aulos era considerado en los tiempos de Homero como un instrumento extranjero, se le encuentra más tarde al lado de la cítara, el instrumento más importante para los griegos y que era utilizado en todas las circunstancias. Será en una época más tardía cuando el aulos caiga en el descrédito, junto a los sabios, y como consecuencia de la caída del culto a Dionisos (siglo VII antes de J.C.) menciona la profesión de tocador de aulos. Herodoto (siglo V a.J.C.), en su obra "Historias" nos da a conocer una información interesante: los Lacedonios tienen en común con los egipcios otra costumbre; para los heraldos, los tocadores de aulos, y los cocineros, la profesión del padre era heredada por el hijo. El hijo de un tocador de aulos se convertirá en otro tañedor de este instrumento, el hijo de un cocinero será cocinero, y el de un heraldo, heraldo.Aulos |
Tocador de aulos con phorbeia
Tocador de Aulo con phorbeia |
Las obras de Platón (427-347 a.J.C.) nos detallan sobre el alto nivel de habilidad que habían alcanzado los músicos y los constructores de instrumentos. Se habla del aulos como del instrumento más rico en timbres, y que podrá tocar en todos los modos. De la Antigüedad tardía nos ha sido transmitida una descripción de este aulos en la "Descripción de Grecia" de Pausanias (siglo II a. J. C.).
La tibia romana
Tibia romana |
Si se consideran los documentos iconográficos existentes sobre la música romana, observamos la ausencia de imágenes tan relevantes y ricas como las de los vasos griegos. A pesar de que la música del mundo antiguo debe ser considerada como perdida, puesto que no existía una escritura sin ambigüedad, y de la que había tan solo quedan pequeños fragmentos, lo que se sabe permite deducir que existía un alto grado de cultura musical. La afirmación que se encuentra en la literatura antigua según la cual el sonido del aulos y de la tibia romana había sido estridente e incisivo, no es ciertamente correcta más que por su carácter exclusivo. Las tibias de sonido fuerte y rudo, que corresponden a esta apreciación, encontraban su uso en la música
orgiástica del culto de Cibeles y Baco. Para estos casos se empleaba un tipo encorvado: "curva tibia"; la tibia frigia estaba formada por dos tubos, uno de los cuales poseía un pabellón encorvado.
El mosaico de Dionisios en Colonia, muestra muy claramente este tipo de construcción. La tibia lidia estaba compuesta por dos tubos rectos. Esta especie se usaba particularmente en la música de teatro y acompañando los cantos y las danzas.
En la época helenística, que empieza tras la esclavitud definitiva de los griegos, hacia 150 a. J.C., numerosos músicos griegos se convertirán en esclavos de amos romanos, e influirán notablemente en la vida cultural romana. El virtuosismo griego, unido a la habilidad de los constructores de instrumentos romanos, conllevó el nacimiento de un instrumento más perfeccionado, provisto de avances técnicos que le permitían prestarse a todos los estilos musicales. Por medio de anillos giratorios ciertos agujeros podían ser cerrados y otros abiertos. Se podía así cambiar de escala. El mosaico de Dionisios, muestra al instrumentista en el preciso momento en el cual cambia la afinación de su instrumento. Los anillos giratorios fueron denominados "bombyx". Por otra parte, se puede distinguir elementos complementarios de los que se desconoce claramente su utilidad. Servían probablemente para tapar los orificios que determinan la altura del sonido o su resonancia. Con cera, los músicos del Antiguo Egipto practicaban ya un proceso similar. Aun hoy oboístas y fagotistas disminuyen con cera el tamaño de los agujeros para lograr así una afinación más correcta.
Los constructores romanos, poseían ya el arte de confeccionar tubos de metal y de encorvarlos. Este proceso ha sido redescubierto recientemente. Las tibias metálicas, fabricadas de este modo, eran utilizadas conjuntamente con el órgano hidráulico en los combates de los gladiadores, y su sonoridad tenía una gran importancia por su potencia. También existía la posibilidad de realizar herramientas para agujerear muy exactas, por lo que se fabricaban también tibias de madera endurecida, e incluso de marfil. Los virtuosos de la tibia, que por otra parte eran altamente respetados, cayeron al nivel más bajo de consideración social. Tenidos por propagadores de una cultura pagana frecuentemente eran rechazados para comulgar. Sin embargo la tradición de los instrumentos dobles se mantuvo hasta la Edad Media, pese a que las invasiones bárbaras hicieron desaparecer numerosas adquisiciones culturales.
El Renacimiento
No hay testigos, pero el problema de saber en qué medida fue la civilización árabe la que hizo pervivir el
Curt Sachs |
Barroco
Jean Baptiste Lully |
Como se ha podido ver, el oboe encontró un ambiente favorable en Alemania. En el "Musicus Curiosus" de W. C. Printz, impreso en 1691 en Friburgo, se ve ya aparecer el término "hautbois", y desde finales del siglo XVIII, los oboes fueron parte de la plantilla permanente de la Opera de Hamburgo.
Hautbois |
Ultima evolución
A inicios del siglo XIX la situación se presentaba del siguiente modo: como hemos visto los instrumentos clásicos, flautas, oboes, clarinetes y fagotes, sólo disponían de dos llaves. La flauta travesera, no tenía más que la llave del Do 3; el clarinete las dos llaves de La3 y Si b 3, pero para el clarinete la adición decisiva había ya tenido lugar: la introducción de la larga llave del Mi 2, que permitía cuando se fuerza el soplo alcanzar el Si 3; por otra parte se ha introducido también la llave del Fa 2. Ya a partir de 1750, se había construido flautas traveseras que llegaban al Do3. Se empieza también a generalizar sobre todos los instrumentos de madera las mejoras para tal o cual nota. Se conoce desde hace largo tiempo las llaves del Sol 1 y Fa l para el fagot, a las que se añadió el Si –1.
En general, hacia 1810 la situación era la siguiente: un gran número de oboístas preferían el oboe de dos llaves, y sin embargo, había ya oboes con 5, 6 e incluso 8 llaves. Al mismo tiempo la tradición secular que consistía en obtener los semitonos utilizando las digitaciones "fourches" (forma de horca), tapando agujeros situados más abajo, estaba empezando a ser reconsiderada, ya que cuando se introducía una llave para un semitono, se constataba que comparando con la antigua digitación en "horca", las particularidades del timbre de esta nota eran muy diferentes, pero en principio no era más satisfactoria que las notas obtenidas por el antiguo sistema. Pero esto no era más que un aspecto de las primeras tentativas. Se hicieron con las llaves experimentos sobre los modelos tradicionales durante el suficiente tiempo como para que se produjesen ciertas mejoras. No hay que olvidar que a inicios del siglo XIX, se creía mucho en el progreso, de modo que se empiezan a emprender, bajo una base científica, las primeras búsquedas acústicas dignas de ser mencionadas.
Johann Georg Tromlitz |
Chladni |
Henri Brod |
Fréderic Triébert |